Entradas

Mostrando entradas de abril, 2018

Un rayo de sol... y cientos de nubarrones

Cuando creo que tengo un poco de paz interior, y que las cosas empiezan a encajar... ¡Zas! Jarro de agua fría. Ayer salí contenta del trabajo, había cambiado mi percepción subjetiva sobre la gente y la cosa fue muy bien. Y al llegar a casa... el juicio paterno: estás muy gorda, ¿cuándo vas a hacer algo?, ¿por qué no te pones en manos de un médico?; ahora no es el momento, ¿y cuándo es el momento?; otra vez con las pastillas de la ansiedad, llevas así toda la vida; ¿para qué vas al psiquiatra?, las pastillas te las puede recetar el de cabecera; ¿y el psiquiatra y el psicólogo, no te dicen que bajes de peso?... Para terminar con un abrazo y romper a llorar sobre mis hombros, y yo guardando el tipo (que, por supuesto, se desmoronó en cuanto salieron por la puerta...). Me prometí a mí misma no contárselo a mi marido como me pidieron, pero ¡oh, destino! esa tarde empezó a poner canciones tristes en Youtube y yo ya no pude más y rompí a llorar... y se lo conté... y yo esperando algo más de